En todo el mundo, los operadores de vehículos comerciales están estudiando la mejor manera de preparar sus flotas para el futuro. La transición a las flotas de vehículos eléctricos no es una elección; es inevitable, pero las empresas se enfrentan a decisiones difíciles sobre cuándo cambiar mientras equilibran las responsabilidades con los clientes y las partes interesadas. También se enfrentan a decisiones difíciles sobre cuándo invertir en infraestructura de carga de flotas, incluidas las estaciones de carga de vehículos eléctricos comerciales.
Los vehículos eléctricos (VE) y la tecnología de carga rápida de CC de alto rendimiento son ahora asequibles y están disponibles, lo que convierte a la energía de las baterías en una auténtica alternativa a los combustibles fósiles. En este artículo analizamos los motores del cambio y la tecnología que acelera el paso a los VE, y explicamos por qué no hay tiempo que perder.
¿Qué impulsa el cambio a las flotas eléctricas?
Hay una serie de factores económicos y normativos que impulsan a los vehículos eléctricos como una opción adecuada, pero -lo que es más importante- la preocupación por el medio ambiente y la percepción de los clientes. Cada uno de estos factores por separado es importante, pero colectivamente es un impulso decisivo para el cambio".
Económicos - La rápida inflación está presionando los costes de todas las empresas, por lo que es fundamental hacer recortes. La transición a los vehículos eléctricos y la instalación de estaciones de recarga comerciales están ayudando a algunas empresas a ahorrar, mejorar su imagen y desbloquear nuevas fuentes de ingresos. Las empresas que operan con 50 vehículos de flota podrían ahorrar más de 65.000 libras (70.000 euros) al año, según estiman los expertos del sector.
Normativa - En 2035, todas las flotas de la UE deberán ser neutras en carbono. El reloj ya corre para los vehículos impulsados por combustibles fósiles, por lo que a los operadores de flotas no les queda más remedio que cambiar; simplemente es cuestión de cuándo.
Medio ambiente - Las flotas emiten hasta el 12,5% de todas las emisiones de carbono de la UE. El cambio climático ya está afectando a nuestra vida cotidiana y no hará sino empeorar. Las empresas deben promover alternativas sostenibles. El cambio a vehículos eléctricos podría reducir drásticamente las emisiones de carbono, según datos de la UE.
Percepción del cliente: el 80% de los clientes quiere comprar a empresas éticas, lo que les da una clara ventaja sobre sus competidores. La transición a los VE demuestra claramente que una empresa se toma en serio su huella de carbono y actúa para reducirla.
¿Son los vehículos eléctricos una opción práctica para las flotas?
La transición a una flota eléctrica es una decisión empresarial estratégica que afecta a todos, desde la sala de juntas hasta la persona al volante. Para la mayoría de las flotas, el simple cambio a VE no resulta práctico. En su lugar, utilizan una solución híbrida que incorpora tanto vehículos propulsados por combustibles fósiles como VE. Este enfoque permite a las empresas disfrutar de las ventajas de los VE sin dejar de atender a sus clientes. También distribuye la inversión esencial en vehículos y tecnologías de recarga.
La integración gradual de los VE permite a las empresas hacer frente a los nuevos retos -como el acceso a la infraestructura de recarga o la formación de los conductores- que podrían obstaculizar su adopción. Con el tiempo, la combinación de vehículos puede cambiar, con un mayor número de vehículos de propulsión sostenible -y, sobre todo, el tipo adecuado de VE- en la combinación de vehículos.
Invertir en infraestructuras de recarga de corriente continua
Invertir en una solución de carga comercial específica es una parte fundamental de su estrategia de VE. Debe asegurarse de que los cargadores puedan gestionar la capacidad y ofrecer la velocidad de carga necesaria para que su empresa siga funcionando.
Uno de los mayores obstáculos para la adopción de flotas de VE es la preocupación por la autonomía y la carga. En concreto, a los operadores les preocupa que los vehículos no puedan hacer frente a la exigente vida de un vehículo de reparto. Una nueva generación de estaciones de carga rápida de CC puede reponer rápidamente la batería de un VE, optimizando la vida operativa de cada vehículo. Los cargadores comerciales de VE como el Heliox Flex 180 pueden suministrar energía simultáneamente a tres vehículos, proporcionando una carga de 100 km en sólo 33 minutos. Para los operadores de autobuses urbanos, eso supone recorrer la distancia de un día en menos de una pausa para comer.
Además de la capacidad suministrada por una estación de carga comercial para VE, el precio de la energía es un problema para todas las empresas. Aunque el mercado sigue siendo volátil, las modernas estaciones de carga para vehículos eléctricos disponen de funciones inteligentes que optimizan la carga y minimizan los costes. Los cargadores interactúan con la red y pueden tomar la energía que necesitan cuando es más barata, manteniendo los costes lo más bajos posible. Las soluciones de recarga también son más eficaces a la hora de incorporar fuentes de energía sostenibles, reduciendo nuestra dependencia colectiva del carbón y la energía nuclear.
La generación actual de cargadores de VE puede proporcionar información valiosa sobre los patrones de uso, el consumo de energía y los requisitos de mantenimiento de cada vehículo y conductor. Estos datos ayudan a los operadores a desarrollar una mayor inteligencia que puede utilizarse para mejorar el comportamiento del conductor y las estrategias de carga de VE que pueden mejorar las operaciones de la flota. El aumento de la productividad y los beneficios se produce al mismo tiempo que la reducción del tiempo de inactividad de los vehículos.
Invertir en estaciones de carga de corriente continua es un compromiso a largo plazo con soluciones escalables y sostenibles. La posibilidad de cargar varios vehículos permite a las empresas añadir vehículos a su flota, lo que favorece la transición a los VE sin perder el control. Aunque los costes iniciales pueden ser elevados, las estaciones de carga rápida pueden proporcionar una valiosa fuente de ingresos adicional. Muchos operadores de flotas comerciales se están planteando permitir el acceso del público a las estaciones de recarga de VE durante las horas de menor actividad, y cargarlas. Esto puede ayudar a compensar el coste de las estaciones de carga y crear una nueva fuente de ingresos muy lucrativa.
Más allá de las cuestiones financieras y operativas, la inversión en tecnología de recarga comercial y flotas de VE disminuye significativamente la huella de carbono de una empresa y envía un mensaje claro sobre el compromiso de una empresa con la responsabilidad corporativa.
Soluciones de recarga para empresas
Las empresas que invierten en estaciones de carga para vehículos eléctricos comerciales pueden reducir costes, gestionar la capacidad y mantener el control total de sus flotas. La tecnología de carga de flotas de última generación, incluida la creada por Heliox, está cambiando la forma de operar de las empresas.
La posibilidad de cargar rápidamente varios vehículos hace que desaparezca la preocupación por la autonomía y, con la estabilización de los costes de la energía, no hay mejor momento para plantearse el cambio a los VE.
Heliox ofrece a los operadores de flotas de todos los tamaños acceso a soluciones y estaciones de carga de CC preparadas para empresas. Además de proporcionar la infraestructura, podemos ayudarle en su transición, trabajando para desarrollar una hoja de ruta hacia una flota sostenible. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para obtener más información.
